José Ignacio Galparsoro. ¿Qué es filosofía hoy? Parte 3

Pero es que la filosofía es la disciplina que se caracteriza por no tener un ámbito limitado de acción. El filósofo podría desafiar a que alguien le nombrara un problema que se situara fuera de los límites de su interés. Por muy aparentemente banal que fuera, o por muy delimitado que aparentemente estuviera al estudio de una disciplina muy especializada, el filósofo no excluye a priori a nada del campo de su interés. Tal vez por ello, en esta época de especialización en la que nos ha tocado vivir, la filosofía sea contemplada como una rareza intempestiva.

La paradójica especificidad de la filosofía estriba en el hecho de que no es un saber específico, de que es el único saber al que ningún otro saber le es ajeno. Esta falta de especificidad es la que permite a la filosofía adentrarse en cualquier terreno, pudiendo en ocasiones levantar el recelo de quienes pretenden ser sus exclusivos dueños. A veces, un exceso de celo corporativista actúa a modo de censor dentro de un determinado terreno del saber, impidiendo el acceso a quien no pertenece a ese gremio.

Se teme que, desde otras disciplinas, puedan ser efectuadas afirmaciones relevantes para su campo del saber, estimándose que se ha producido una invasión de competencias. Y si el invasor proviene del campo de la filosofía, el recelo es aún mayor, pues se sospecha (en base a razones históricas) que la filosofía está intentando recuperar un protagonismo que tuvo en su momento y que perdió; se teme, en definitiva, que esté intentando reconquistar un territorio que fue suyo.

Esta falta de especificidad, y los recelos que despierta, deberían hacer reflexionar al filósofo sobre la relación que su disciplina mantiene con los demás campos del saber. Mantener la arrogante actitud de la disciplina omniabarcante que detenta la última palabra ante las demás disciplinas resulta, cuanto menos, desafortunado. Por supuesto, la actitud contraria de una filosofía acomplejada que manifiesta que no tiene nada que decir y que, por ello, debe subordinarse por completo a las demás disciplinas, no resulta mucho más acertada. Por tanto, resulta ocioso establecer diferencias jerárquicas entre los saberes, intentando determinar a cuál de ellos le corresponde el papel de señor o de siervo.

La tarea del pensamiento es producir ideas. El pensador—o sea, en un sentido amplio, el filósofo— es el productor de ideas. Poco importa la etiqueta que se quiera colocar sobre una idea interesante. Lo que verdaderamente importa es la idea y no el nombre de la disciplina en la que se supone ha sido forjada. Pues las ideas son fruto del esfuerzo de esos hombres que se han atrevido a pensar, es decir, que se han preocupado por ejercitar el pensamiento. Y éste está presente en todos los hombres, independientemente de la disciplina en que desarrollen su actividad. Una idea interesante no es patrimonio de ninguna disciplina; es patrimonio de la humanidad entera. En esta medida, y dado que mediante la producción de ideas aspiran a alcanzar un saber, los practicantes de cualquier disciplina del saber son también filósofos; filósofos más específicos que nosotros, los filósofos “profesionales” que nos caracterizamos por la falta de especificidad, pero filósofos al fin y al cabo.

Si las cosas fueran tomadas de esta manera, se facilitaría la circulación de las ideas. Si este “espíritu” filosófico que recorre todos los campos del saber asomara su cabeza y se hiciera más visible, los beneficios teoréticos que reportaría serían tangibles.

Nadie renunciaría a alimentarse de las ideas de los demás por el mero hecho de que haya sido colocada sobre éstos la etiqueta de “filósofo”, “científico”, “escritor”, “artista” u otra.
Si a la filosofía no le conviene el papel de señor de las demás disciplinas, tampoco ha de aspirar a convertirse en una especie de director de la orquesta del saber, que guiara los movimientos de cada uno de sus intérpretes. Más bien, el papel del filósofo puede asemejarse al de un modesto recolector de ideas, que le sirven de alimento para la fabricación de sus propias ideas, las cuales serán expuestas para que puedan, a su vez, ser recolectadas por quienes estén interesadas en las mismas. Que sus ideas caigan en saco roto o no, es algo que no depende de su voluntad. Pero el filósofo deseará fervientemente que ello no sea así. Tendrá interés en que sus ideas sean recolectadas por otros, quienes, estimulados por ellas, podrán dar lugar a nuevas ideas que, al final del proceso, el filósofo podrá de nuevo recolectar.

El proceso de intercambio es, así, ilimitado y multidireccional; sin jerarquías ni indicación de direcciones obligatorias. Esto no es únicamente la expresión de un deseo, sino el convencimiento de que el proceso de producción de ideas interesantes tiene lugar de esta manera. La filosofía no debe perder tiempo ni energías en reivindicar un puesto privilegiado en el campo del saber. Pero sí debe defender vehementemente el derecho a que su voz sea escuchada. Acallar la voz de la filosofía equivaldría a mutilar una parte significativa de la actividad de la razón humana. Por ello, la apología de la filosofía va más allá de la defensa de unos intereses meramente corporativistas. Tomar partido por ella es defender una parte importante de la actividad humana. Y al formular preguntas como la vuestra estáis contribuyendo a ello. En efecto, prestando interés al problema de la filosofía estáis haciendo filosofía. Por tanto, la respuesta a la pregunta que planteáis está contenida en el hecho mismo de su formulación. No os debe, pues, sorprender si concluyo estas páginas afirmando que la pregunta “¿qué es filosofía hoy?” puede ser respondida así: “formular preguntas como ¿qué es filosofía hoy?”.

José Ignacio Galparsoro
(Departamento de Filosofía, UPV/EHU)

Si quieres volver a leer el artículo ¿Qué es filosofía hoy? haga clic aquí

Estudia Filosofía en la UCV

Síguenos en las redes sociales:

grado en filosofía online FaceBook: Estudia el Grado en Filosofía en la UCV
grado en filosofía online Twitter: Grado en Filosofía Online. Estudia Filosofía desde casa
grado en filosofía online Linkedin: Grado en Filosofía Online. Estudia Filosofía desde casa

The following two tabs change content below.

Administrador

Consultor de Marketing y Social Media. Apasionado de las nuevas tecnologías y la formación online.

admin

Consultor de Marketing y Social Media. Apasionado de las nuevas tecnologías y la formación online.

Leave a Comment